Elena Agúndez Rodríguez

Que si no hago nada es porque así nada puede salir mal.

Te puedes poner cuatro capas de ropa, encender la chimenea, meterte en la cama, echarte una manta por encima, pero seguirás teniendo frío. Date cuenta de que no es el frío lo que sientes, son escalofríos que recorren todo tu cuerpo tan rápido que lo único que sientes es dolor aunque no sepas por que. Son milésimas de segundo que te hacen tener miedo de todo lo que hay a tu alrededor. Es una sensación parecida al pánico.

No se trata de tener miedo, se trata de saber lo que quieres, lo que te apetece, lo que necesitas, tener muy claro hasta donde estarás dispuesto a llegar. No es malo tener miedo, lo malo es que el miedo domine tu vida, que no disfrutes de todo lo que tienes tan solo por su culpa.